El alcalde, el presidente de la CHJ y la subdelegada del Gobierno visitan la actuación financiada con 981.093,29 euros del Plan E
El alcalde, Andrés Ripoll, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), Juan José Moragues, y la subdelegada del Gobierno en Alicante, Encarna Llinares, han anunciado hoy la finalización de las obras que han permitido la restauración ambiental, paisajística y la adecuación social del cauce del río Algar. El proyecto ha contado con una inversión de 981.093,29 euros con cargo al Plan E del Gobierno central.
Para el primer edil, se trata de una iniciativa “con la que ya nos comprometimos en campaña electoral ya que apostábamos por cuidar y proteger el río y así lo transmitimos a la Confederación Hidrográfica del Júcar”. “Agradecemos a su presidente y al Plan E del Gobierno central el apoyo recibido para ejecutar esta obra que ha tenido un impacto positivo en el municipio, que era reivindicada desde hace años y que ahora podrán disfrutar todos los ciudadanos”, ha insistido Ripoll.
En palabras del presidente de la CHJ, el actual aspecto del río es “absolutamente extraordinario” y ha felicitado al alcalde, a los técnicos y a TRACSA por “mostrar una gran capacidad técnica, sensibilidad ambiental y el compromiso social necesario para ejecutar este tipo de proyectos”. “Se trata de una actuación más dentro de la política medioambiental del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero para garantizar los recursos hídricos y el desarrollo sostenible de la Comunidad Valenciana”, ha remarcado Juan José Moragues. Asimismo, ha recordado que en el 2003 sólo se invirtieron 190.000 euros en la provincia de Alicante para el mantenimiento de sus cauces mientras que “nosotros hemos invertido del 2004 al 2009 más de 16 millones de euros” y en la Comunidad Valenciana “hemos pasado de una media de 500.000 euros a una inversión de 25 millones de euros de los cuales Altea ha recibido casi un millón de euros gracias a la gestión de su alcalde”.
Por su parte, la subdelegada del Gobierno ha insistido en que “la finalización de las obras suponen un antes y un después para todos los alteanos y también para los miles de turistas que nos visitan ya que debemos cuidar el escaparate que ofrecemos”. En Altea, se han invertido en menos de dos años con el Plan E, “más de 6,5 millones de euros donde se justifica el trabajo que se está haciendo para que los Ayuntamientos puedan mejorar sus inversiones”.
El proyecto ha permitido la regeneración natural del cauce del río Algar, el acondicionamiento del tramo de la desembocadura y la puesta en valor del conjunto de recursos paisajísticos y naturales del municipio. Con este objetivo, se han limpiado los escombros y otros restos impropios del río; se ha eliminado la vegetación alóctona e invasora, fundamentalmente zarzamora, madreselva y grama, mejorando la capacidad hidráulica; se ha recuperado la vegetación con especies autóctonas y ribereñas como Sarga, Arrayán o Chopo; también se han incorporado geoceldas con semillas de especies herbáceas del tipo fenal, aro o acanto; y se ha ordenado el cauce con la formación de cajeros de aguas bajas, protección de taludes y reducción de la erosión.
Además, se ha adecuado el entorno para su uso social, habilitando zonas de paseo y esparcimiento, y con una senda principal que recorre toda la zona por el margen derecho del cauce.
