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En la mañana de ayer, la Corporación Municipal se reunía en sesión plenaria y aprobaba por unanimidad una rebaja del 27 al 10% en el tipo impositivo del Impuesto sobre el Valor de los Bienes de Naturaleza Urbana, más conocido como la Plusvalía. Una medida, que a pesar de ser votada de forma favorable por la totalidad de grupos que componen dicha Corporación, generó un intenso debate. En cuanto a los otros tres puntos del Orden del Día que contenía la actividad resolutoria y que suponían la aprobación de una ordenanza para la Ordenación del Medio Rural; la modificación parcial de la Relación de Puestos de Trabajo del Ayuntamiento y la regulación, mediante ordenanza, de una tasa que suponga el derecho a examen en el caso de oposiciones, quedaron sobre la mesa porque así lo decidió la mayoría de los representantes municipales.


Fue el responsable de Hacienda, Eloy Hidalgo el encargado de exponer la medida planteada por el Equipo de Gobierno de rebajar la Plusvalía, con el objetivo de evitar una significativa subida de la misma a causa de la revalorización que han sufrido las propiedades a consecuencia de la revisión catastral. “Como ya anunciamos, el Equipo de Gobierno está trabajando para que los alteanos no sufran una subida de impuestos y esta es una medida más que proponemos”, alegaba Hidalgo durante la exposición.


El edil socialista explicaba que la Plusvalía la tienen que pagar sólo aquellas personas que venden una propiedad; “es un impuesto que se liquida automáticamente en el momento que se transmite un bien”.


En este punto Hidalgo se refirió a sendos informes de intervención y tesorería pertenecientes al expediente, en los que se avala la medida. Según Hidalgo, en el informe de tesorería se reflejan los resultados de un estudio elaborado con una muestra de 40 transmisiones. Tras el estudio, el informe presenta tres supuestos, siendo el último de ellos el que se tenga en consideración ya que se considera el más beneficioso para los ciudadanos y que supone una rebaja al 10% del tipo impositivo y una bonificación en el valor del terreno del inmueble del 60%, máximo permitido por la Ley y que estaba fijada en un 40%.


Tras la intervención expositiva del responsable municipal de Hacienda, tomaron la palabra los grupos de la Oposición. En primer lugar fue la edil no adscrita Paca Sevila la que dio el beneplácito a la medida, pero no sin antes calificarla de “parche” a una herida producida por la revisión catastral. También el Bloc–Verds se mostró a favor de la aplicación de la medida propuesta por el Equipo de Gobierno y su portavoz en temas económicos, Baltasar Ripoll, argumentó: “se trata de regular las ordenanzas a la revisión catastral. Si no modificamos la ordenanza sufriremos un incremento alto de este impuesto. Había 3 opciones y se ha elegido la más reducida”. Finalmente Ripoll propuso que la nueva ordenanza sea revisada anualmente.


En nombre del Partido Popular fue su edil Miguel Ortiz quien criticó la forma, que no el fondo, de la cuestión calificando la medida como “una rectificación del Equipo e Gobierno ante la subida de los impuestos que conlleva la revisión catastral”. Revisión que una vez más el PP ha pedido paralizar. Además, Ortiz consideró la rebaja del tipo impositivo de la Plusvalía como una propuesta “precipitada e improvisada porque responde a la subida que se aplicó a partir del 1 de enero en un 326% y a las quejas de los ciudadanos e improvisada porque hace 9 meses que el Equipo de Gobierno tiene estos datos y no ha hecho nada antes”. “La solución definitiva a la subida que están sufriendo los impuestos es la retirada del catastrazo por eso solicito que se cumpla el acuerdo plenario que aprobó solicitar la retirada”, añadía Ortiz; quien finalmente, a pesar del tono crítico de su intervención, se posicionó a favor de cualquier medida que suponga aliviar los bolsillos de los ciudadanos.

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