Los alteanos Ana y Alberto se encuentran inmersos en un viaje que iniciaron el pasado 13 de marzo en Guatemala y que les lleva a recorrer Centro y Sud América en bicicleta. Su objetivo es llegar a Ushuaia en la Patagonia Argentina a finales de año o principios del próximo. Como ellos mismos explican a este medio, “el objetivo principal es aprender mucho, aprender de aquellos lugares que visitamos, de todas aquellas personas que conocemos a lo largo del camino, aprender también de nosotros mismos tanto individualmente como en pareja. En un viaje como éste se suceden situaciones de todo tipo que día a día tenemos que ser capaces de superar”.
Hasta el momento, este “par de nómadas” –como ellos mismos se definen- han recorrido en bicicleta 9 países: Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, Colombia, Ecuador y Perú. Hoy mismo dicen adiós a Perú para entrar en Bolivia.
El último contacto entre Ana, Alberto y Alteadigital fue el pasado 29 de septiembre, cuando se encontraban en Ayacucho, Perú. Habían pasado casi 200 días desde que habían iniciado su ruta y 8.081 kilómetros recorridos.
“La idea de nuestro viaje nace por casualidad, hace unos años estuvimos recorriendo India y Nepal durante cuatro meses , en aquel momento nos dimos cuenta que ansiábamos algo más. Tampoco sabíamos en realidad que es lo que queríamos, pero después durante un periodo trabajando en el norte de España fuimos perfilando la idea final que en estos momentos estamos realizando. Viajar en bicicleta, además de enmarcarse dentro de la idea de respeto al entorno, no hace más que añadir un gran reto personal a esta aventura de conocer diferentes países. No éramos ciclistas habituales, inicialmente pensamos en algo más asequible para nosotros, recorrer Cuba en bicicleta, una isla, casi plana, 1000km…, pero posteriormente nos fuimos ilusionando más y más hasta decidir ampliar el recorrido para recorrer Centro y Sud América de norte a sur”, comentan los protagonistas.
En su aventura, Ana y Alberto pasan gran parte del tiempo sobre Rucio y Rocinante, sus bicicletas a las que han puesto nombres “en honor a otros célebres locos de la literatura española”. Hasta el 29 de septiembre habían pasado 658 horas pedaleando; llegando a alcanzar una velocidad máxima de 83km/h y habiendo sufrido en total 5 caídas y 43 pinchazos.
El equipaje de Ana y Alberto es bastante completo, a pesar del poco espacio que una bicicleta puede ofrecer y en él podemos encontrar una tienda de campaña, esterillas y sacos de dormir; hornillo para preparar la comida; filtro para purificar el agua, placas solares para cargar las pilas de las linternas y cámara fotográfica, etc. “Para hacer noche solemos solicitar espacio para poner la tienda en los cuarteles de bomberos, casa particulares, Cruz Roja, policía, acampada libre e incluso hacemos uso de portales de intercambio de hospedaje gratuito en Internet. Cuando ninguna de las opciones anteriores funciona solemos optar por pensiones y hostales baratos para pasar la noche”, apuntan.
Y seguro que entre su equipaje, no olvidan reservar un pequeño espacio para su Altea. Una Altea que a través de estos dos ciudadanos viaja a los lugares más recónditos y bellos que la naturaleza ha creado sobre la faz de la tierra.
Quien quiera seguir el viaje de estos dos alteanos aventureros, puede realizarlo a través de la página web www.pardenomadas.com. que los protagonistas actualizan cuando las circunstancias se los permiten.
