El Presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, asistió ayer por la noche a la 26 edición del Castell de l’Olla, junto con el Alcalde de Altea, Miguel Ortiz, con quien presidió la cena que tuvo lugar antes del Castell en los Jardines de Villa Gadea. El acto contó con la asistencia del Conseller de Economía, Máximo Buch, la Consellera de Cultura, Lola Johnson, y el Conseller de Gobernación, Serafín Castellano. Asimismo, también participaron el Subdelegado del Gobierno en Alicante, Alberto Martínez, el presidente de la Cofradía del Castell, José Pérez Gorgoll, el Rector de la Universidad Miguel Hernández, Jesús Pastor Ciurana, y el Rector de la Universidad de Alicante, Manuel Palomar Sanz, entre otros, así como una nutrida representación de senadores y diputados autonómicos y nacionales.
El Presidente de la Generalitat destacó que el Castell de l’Olla “se trata de una de las citas más importantes del verano en la Comunidad Valenciana, es una muestra de colorido y de amistad, y supone la posibilidad de compartir entre todos una gran noche, con un gran castillo de fuegos artificiales, recibiendo la hospitalidad de un gran pueblo como es Altea”. Alberto Fabra señaló que “para la Comunidad Valenciana el hecho de celebrar eventos que la identifiquen y la diferencien es fundamental porque somos una Comunidad eminentemente turística y por ello debemos respaldar aquellas celebraciones que tienen una tradición consolidada”. “Por ello desde la Generalitat hemos colaborado con el Castell y con todas las personas que hacen posible que Altea sea conocida por este gran castillo de fuegos artificiales, porque se trata de un ejemplo de la Ilusión, esfuerzo y constancia por mantener nuestras tradiciones, que nos identifican a la Comunidad Valenciana”, manifestó Fabra. Por su parte, el Alcalde de Altea resaltó la presencia de los miles de alteanos y turistas “que han venido a disfrutar del Castell, al tratarse de una noche inolvidable porque durante la noche de Sant LLorenç Altea se convierte en una referencia para toda la Comunidad Valenciana”. Miguel Ortiz remarcó que “la Comunidad Valenciana es la suma de muchas pequeñas cosas y Altea quiere ocupar su espacio, diferente a los demás, y con noches como la de hoy lo vamos a conseguir, gracias a la dedicación de todas las personas que forman la Cofradía del Castell, unidos a la fuerza que nos proporciona la Generalitat Valenciana, la Diputación de Alicante, y el esfuerzo de muchos comercios locales”. “Porque entre todos han hecho posible que la noche de Sant LLorenç sea una noche maravillosa y aunque éste ha sido el año de menor presupuesto, se trata del año de mayor valor del Castell, gracias al trabajo de todas las personas que lo han hecho posible, y la presencia del Presidente de la Generalitat es un impulso fundamental para que Altea vuelva a convertirse en centro de referencia de la Comunidad Valenciana”, reiteró Ortiz. El Castell fue disparado por la pirotecnia Carlos Caballer de Valencia, que empleó 1.700 kilos de pólvora. Para velar por la seguridad, participaron 192 efectivos, entre Policía Local, Guardia Civil, Ambulancias DYA y Protección Civil.