Según el equipo de gobierno “La asociación Hospal tergiversa el contenido y el alcance de la nueva ordenanza”
El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Altea, formado por Compromís y PSOE, a raíz de las informaciones que han sido vertidas en torno a la ordenanza de la ocupación de la vía pública en los siguientes considera que “la aprobación de la nueva ordenanza de ocupación de la vía pública ha generado una inesperada reacción por parte de Hospal, asociación que recoge los intereses de un grupo de hosteleros de esta localidad”. Es inesperada por cuanto contiene una serie de declaraciones públicas en las que se difunde información que falta a la verdad de los hechos.
Este equipo de gobierno entiende que en cuestiones que afectan a un sector tan trascendente en el desarrollo de la vida económica de Altea, clave para su imagen y para su futuro, no le queda otra que salir al paso de cualquier actuación que provoque malentendidos que no nos permitan avanzar.
El Ayuntamiento ha destinado muchos recursos y esfuerzos en mejorar la proyección nacional e internacional de la marca Altea durante estos últimos años. No es casualidad que Altea haya sido el primer municipio en España en conseguir la certificación de Destino Turístico Inteligente, con una inyección de 3,9 millones de euros en el camino hacia el modelo de turismo sostenible del que somos referentes. Ni lo es que, a diferencia de otros municipios de la comarca, las cifras de ocupación y visitas durante estos dos años de pandemia hayan batido récords.
“Las cifras están ahí y son contrastables en diversas fuentes. Indican un incremento en un 70% de visitantes durante la temporada alta respecto a los años pre-pandemia y ocupaciones en torno al 90% de la capacidad. Tampoco son necesarias: cualquiera que haya paseado por las calles de Altea puede dar fe de ello”.
El equipo de gobierno quiere dejar claro que “cuando el representante de Hospal da a entender públicamente que los hosteleros alteanos no han recibido apoyo alguno de su Ayuntamiento en tiempos de pandemia o cuando afirma que no se les ha condonado ni un euro de las tasas municipales, está faltando a la verdad”.
“Ni en 2020 ni en 2021 se ha cobrado la tasa por la ocupación de la vía pública y el Ayuntamiento ha puesto a la disposición de todos los empresarios locales su maquinaria administrativa para tramitar ayudas de todas las administraciones. Se ha trabajado con eficiencia para que no se escapase ni un solo euro de las mismas, y así ha sucedido. La hostelería recibió en 2021 un monto de 671.000 € de dinero público en una primera fase, y unos 150.000 € adicionales en una segunda. La no recaudación de la tasa ha supuesto una minoración de ingresos para las arcas públicas de, en cifras redondas, 360.000 € en dos años”, han recordado.
Con referencia al enfrentamiento que se ha producido por parte de Hospal con el Consistorio el equipo de gobierno aclara que “en realidad, la cuestión de fondo que enfrenta a este grupo de empresarios con el Ayuntamiento es la pugna por la vía pública. Por evidente que pueda parecer, conviene recordar que la vía pública se denomina así porque pertenece a los ciudadanos. A todos los ciudadanos. Entre otras razones, porque ellos son quienes contribuyen a su mantenimiento. Cuando el titular de un negocio privado ocupa parte de esa vía en el ejercicio de su actividad y, por tanto, impide el uso de ese tramo de calle al ciudadano, tiene que compensarle por ello. Además, ha de hacerlo de manera ordenada, respetando ciertas normas. Es una cuestión de convivencia básica entre los intereses públicos y los privados. Precisamente para eso están las ordenanzas. Las nuevas y las viejas que, por cierto, se han venido incumpliendo sin ningún escrúpulo ante la falta de control por parte de los gestores públicos de entonces”.
Y añaden que “los espacios cerrados en la vía pública han estado siempre prohibidos y las sombrillas-parasol siempre admitidas. Siempre ha existido la obligación de retirar el mobiliario de las terrazas cuando se cierra el local, y es lógico que sólo se puede ocupar el espacio solicitado y autorizado. La nueva ordenanza no ha cambiado nada de todo esto. Lo que sí ha cambiado es la actitud ante las irregularidades. La inmensa mayoría de los hosteleros no tienen ninguna duda sobre estas cuestiones y cumplen las normas sin mayor problema. Sin embargo, Hospal parece reivindicar un derecho que no tiene: el de disponer a su antojo del espacio público”.
Esta nueva ordenanza es el resultado de un proceso muy largo que arranca en la legislatura pasada, con multitud de reuniones con todas las partes implicadas. “Entendemos que Hospal está en su perfecto derecho de defender los intereses de sus asociados como mejor crea conveniente, pero sería deseable tener una interlocución más amplia y representativa, más seria, capaz de plantear propuestas que ayuden a mejorar la integración del sector en un proyecto de futuro, más allá de proponer sistemáticamente una menor contribución a las arcas públicas o una ocupación del espacio sin límites. Los interesados en contrastar cualquier punto relacionado con la ordenanza, la tiene a su disposición íntegramente en la página web del Ayuntamiento”.