“Sustituir el suelo de canto rodado por otro de hormigón impreso es un atentado contra la esencia de nuestro casco antiguo”
Cada semana nos dan un susto. Hace un mes, intentaron dar permisos para construir una fábrica de hormigón en el cauce protegido del río Algar. Hace diez días querían cortar una pinada en Villa Gadea para construir un corredor verde. Hoy toca enterarnos por terceros que quieren liquidar el suelo de canto rodado del casco antiguo de Altea para sustituirlo por una imitación en hormigón impreso.
“Ya no es cuestión de valorar los gustos, sino de proteger nuestro patrimonio histórico”, comentó la concejala de CIPAL, Carolina Punset. No se pueden acometer actuaciones irreversibles sobre técnicas de construcción tradicionales. Si se realizan, la gente tiene que ser consciente que nos hacen perder valor como municipio turístico y que eso repercutirá negativamente en los negocios y comercios de la zona.
Lo auténtico es un valor que debemos preservar en Altea, porque para las imitaciones ya están los parques temáticos. El casco antiguo de Altea conserva todo su sabor gracias al mantenimiento de su arquitectura tradicional. “Si empezamos a ponerle el mismo suelo que elegiría Terra Mítica para sus decorados, romperemos la esencia de lo antiguo, de lo tradicional, un valor esencial en Altea” afirmo la concejala. Nuestro grupo espera que el equipo de gobierno socialista reconsidere su decisión.