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Las concejalas de CIPAL, Carolina Punset, e Independiente, Paca Sevila, presentarán una moción conjunta en el Pleno de mañana jueves 2 de diciembre en la que solicitan pedir al Ayuntamiento de Callosa la retirada del Plan Parcial Margequivir, por considerar que éste afectará negativamente al medio ambiente y a Altea por la proximidad del mismo.


MOCIÓN


Las concejalas del Ayuntamiento de Altea, Carolina Punset (CIPAL) y Paca Sevila (Independiente), presentan al Plenario de la Corporación Municipal la siguiente moción para su debate y aprobación:


El Ayuntamiento de Callosa d’En Sarrià, por unanimidad de los tres grupos municipales que lo integran –PP, PSOE y Bloc- ha aprobado de forma provisional un macroproyecto urbanístico denominado Plan Parcial del Sector 14 Anibits-Margequivir, por el cual se quiere urbanizar una superficie de 1.675.579 m2 de suelo que linda con el término municipal de Altea para la construcción de 2.178 chales, 50 villas residenciales, un campo de golfo de 18 hoyos y un hotel. Todo ello, además, en una zona declarada Lugar de Interés Comunitario (LIC) como es el de la Serra Bèrnia-Ferrer y a poca distancia de un otra área de especial protección como es la zona húmeda del Río Algar.


En un momento de gravísima crisis económica a nivel mundial en la que el mercado inmobiliario prácticamente se ha hundido por la sobresaturación de la oferta, y donde los propios inversores abandonan los proyectos urbanísticos mastodónticos –como demuestra el hecho de que el Agente Urbanizador inicial del proyecto callosí haya desistido de llevarlo a cabo-, el Ayuntamiento de Callosa d’ En Sarrià “consciente de la necesidad (demandas) de nuevos desarrollos turísticos” quiere promover directamente una brutal agresión ecológica contra la comarca que será, además (y solamente habría que mirar las “ciudades fantasmas” irlandesas), un negocio ruinoso y suicida.


Por otro lado, aunque el macroproyecto se quiere desarrollar en el municipio de Callosa, se aproxima al máximo al término de Altea porque pretende canalizar las aguas negras residuales de más de 5.000 hipotéticos residentes a nuestra depuradora y regar, además, los cerca de 100.000 m2 del campo de golf con las aguas depuradas de Altea. Callosa preserva en su Plan General de Ordenación Urbana la casi totalidad de su término municipal como suelo agrícola y, utilizando el símil tan gráfico y tan cierto del de “La gallina de arriba mea a la de abajo”, nos quiere verter sus aguas negras a una depuradora –la de Altea- que se encuentra ahora ya colapsada e incapaz de dar servicio a la totalidad de nuestro municipio, donde aún hay zonas que no están conectadas.


En el Plenario de nuestro Ayuntamiento de hace dos meses ya pedimos a todos los grupos municipales de Altea que tienen representación en el Ayuntamiento de Callosa que hicieran las gestiones necesarias con los miembros del sus respectivos partidos para que abandonaran un proyecto que consideramos un auténtico atentado ecológico en una de las zonas medioambientalmente más valiosas de la Marina Baixa, además de irresponsable porque contraviene las bases del Plan Estratégico Territorial –en proceso de elaboración por parte de la Conselleria de Territori- donde la planificación urbanística y territorial deje de ser cuestión particular de cada Ayuntamiento si afecta al conjunto de la comarca, como es el caso.


Resultaría también paradójico que mientras algunos partidos de Altea abandonaron –esperamos que definitivamente- la idea de construir una macrourbanización en torno al río Algar, ahora toleren que nos construyan otra de semejante a pocos metros de la que se quería hacer. Resulta muy difícil defender en Altea la preservación del Algar y del paisaje de la huerta que le rodea y se acepte, en cambio, que se urbanice de manera salvaje a sus puertas. Coherencia, señoras y señores, coherencia.


Por todo lo expuesto se solicita de nuestro Ayuntamiento la adopción de los siguientes acuerdos:


1) Pedir al Ayuntamiento de Callosa la retirada inmediata del macroproyecto urbanístico en la partida de Margequivir.
2) Mostrar la negativa rotunda del Ayuntamiento de Altea a aceptar que las infraestructuras de aguas residuales vengan a parar a la depuradora de Altea y que el campo de golf se pueda regar con las aguas depuradas de Altea.
3) Que nuestro Ayuntamiento se persone como parte interesada en el expediente para poder alegar en todo el proceso de su tramitación.
4) Instar a la Consejería de Territorio y Vivienda que informe negativamente respecto al expediente del mencionado Plan Parcial.


No obstante el Plenario, con su superior criterio, acordará lo más oportuno.


Altea, 29 de noviembre de 2010

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