El Ayuntamiento de Altea impulsa una red de Comunidades de Energías Renovables (CER) en el municipio que contará con diferentes instalaciones fotovoltaicas que darán cobertura a aquellos hogares y pymes interesados en formar parte de esta iniciativa de autoconsumo colectivo.
Este proyecto, que se enmarca dentro de la iniciativa “Altea zero emissions”, fue presentado ayer por el concejal de Medio Ambiente, José Orozco y el presidente de Sapiens Energía -cooperativa especializada en el diseño, construcción y gestión de comunidades energéticas de renovables-, Juan Sacri. El acto, que llenó la Casa de Cultura, contó con la presencia de Mireia Mollá, consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica y Pedro Fresco, director general de Transición Ecológica.
“Es el momento de dar el salto, nos encontramos en emergencia climática y toda acción es importante y necesaria, sobre todo cuando hablamos de la generación de energía. La energía es hoy en día necesaria para todo, desde la luz de nuestros hogares, a la red de agua potable o el transporte, sin ella el mundo no puede funcionar, pero estamos dañando al planeta. Por ello nos enfrentamos, como ciudadanos y como administración, ante dos retos: la reducción del consumo, algo difícil con la forma en que funcionamos y la otra, producir energía menos contaminante, y ahí es donde entran iniciativas tan importantes y beneficiosas como esta, en la que el ciudadanos se convierte a la vez en productor y consumidor de energía, tenemos en nuestra mano hacer la transición energética que el planeta nos demanda y si no la hacemos nosotros, la harán contra nosotros”, comentó el concejal de Medio Ambiente, José Orozco.
Este proyecto contempla el uso de cubiertas de titularidad municipal para poder instalar placas fotovoltaicas que den suministro de energía renovable a empresas y viviendas que se agrupen en comunidades energéticas. Estos deberán encontrarse en un radio de 500 metros tal y como marca la normativa vigente.
El Ayuntamiento de Altea ha promovido un estudio inicial de las cubiertas públicas más aptas para acoger las placas solares, llevado a cabo por Sapiens Energía -cooperativa especializada en el diseño, construcción y gestión de comunidades energéticas-. Se han incluido edificios públicos como el Centro Social, el Centro Cultural Altea La Vella, el Palau Altea, el polideportivo municipal o en alguna entidad privada como las naves de La Pública.
La red de instalaciones fotovoltaicas se desplegará en sucesivas fases. La estrategia y ubicaciones concretas se definirán en un proceso de cocreación y codiseño abierto a todas las personas del municipio interesadas en participar, durante los primeros meses de 2022.
Las comunidades energéticas, permiten a la Administración local, ciudadanía y pymes producir y gestionar su propia energía; mejorar la eficiencia; reducir los costes energéticos de edificios y equipamientos públicos y de los usuarios privados -con ahorros medios de entre el 20% y el 30% desde el primer día-; avanzar en los objetivos de descarbonización -reduciendo las emisiones de CO2 a la atmósfera-; dinamizar la actividad económica y el empleo local, y, con todo ello, mejorar el bienestar y la salud de las personas.
“Las comunidades energéticas permiten avanzar hacia una transición energética real, en la que las personas asumen un papel activo, convirtiéndose en productores, gestores y usuarios de su propia energía. Es un modelo de generación de energía limpia, de proximidad, que genera impactos positivos en el territorio y en las personas. Los primeros proyectos, en los que la Comunitat Valenciana está siendo pionera, así lo están demostrando. Supone, en la práctica, hacer realidad el sueño de ‘poner la energía en manos de la gente’”, apuntó Juan Sacri, presidente de Sapiens Energía.
“Para el gobierno valenciano la instalación de estas comunidades energéticas es una prioridad y por ello, se han puesto en marcha y hay previsto implementar más, ayudas que permitirán la financiación de estos proyectos a fondo perdido de hasta un 60%, una oportunidad única para dar el paso y potenciar este modelo que estamos seguros crecerá mucho en los próximos años”, declaró Pedro Fresco, director general de Transición Ecológica.
Cerró el acto Mireia Mollá, consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, quien destacó la valentía de los ciudadanos que ayer se reunieron en esta presentación, por ser parte de la revolución energética que acaba de comenzar. “Los municipios son el motor de cambio de esta transición ecológica, los ayuntamientos como el de Altea son pioneros y hemos de agradecer su trabajo, pues gracias a ellos la Comunidad Valenciana es y será líder en nuestro país en la puesta en marcha de comunidades locales energéticas. Tenemos la oportunidad de ser el actor del cambio y también la obligación de serlo, poner en marcha estas iniciativas será una gran contribución para poder parar la emergencia climática en la que nos encontramos”, finalizó.
“Altea Zero Emissions”
Este proyecto se enmarca en la estrategia “Altea Zero Emissions”, que tiene como objetivo reducir en al menos un 40% las emisiones de C02 del municipio hasta 2030. En este contexto, el Ayuntamiento de Altea ha puesto en marcha una serie de medidas para fomentar el autoconsumo de energías renovables, tanto individual como colectivo -como bonificaciones fiscales a instalaciones productoras-, así como acciones centradas en la ordenación del territorio y de los espacios urbanos; la movilidad sostenible -ámbito en el que se contempla el despliegue de una red local de recarga para vehículos eléctricos y bonificaciones fiscales-; los espacios naturales -con medidas de mantenimiento, conservación e impulso-, y la gestión de los residuos -con especial foco en el reciclaje-.
Municipio pionero en transición energética
Con la puesta en marcha de su comunidad energética, Altea se une al grupo de municipios pioneros en toda España en apostar por este modelo de autoconsumo colectivo de proximidad, considerado por la normativa europea clave para lograr la transición energética. La Comunitat Valenciana es líder en la implantación de comunidades de energías (CER) en España, gracias a la apuesta de la Generalitat.
Su máximo exponente es el ‘Plan de Fomento de las Comunidades Energéticas Locales’, que plantea que todos los municipios (542) tengan, al menos, una comunidad energética en 2030.
