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Después de que la empresa adjudicataria decidiera detener de forma unilateral las obras, desde el Ayuntamiento de Altea se aprobó una orden de inicio de estas actuaciones atendiendo al contrato firmado.

 

El alcalde de Altea, Jaume Llinares, y el concejal de Infraestructuras, Roque Ferrer, han informado de que se han reanudado las obras que se están realizando en las calles Gabriel Miró y Adolfo Quiles y finalizarán, previsiblemente, a lo largo de este mes de junio.

El pasado mes de febrero comenzaron las obras, con un plazo de ejecución de 5 meses, y durante el mes de mayo la empresa adjudicataria decidió unilateralmente detenerlas. En ese momento, y ante la situación que se planteaba, el alcalde y el concejal de Infraestructuras comparecieron públicamente para informar sobre la suspensión de la obra »para que toda la ciudadanía conociera la situación que nos afectaba directamente al Ayuntamiento y a los alteanos y alteanas», señalaba el alcalde.

Estas actuaciones comenzaron el pasado mes de febrero y la empresa adjudicataria, Urbamed, presentó el 11 de mayo un escrito en el Ayuntamiento de Altea solicitando la suspensión de la obra y la modificación de las condiciones del proyecto, alegando que el precio que ofreció en la licitación no se ajustaba al coste real de las unidades de obra y demandaba la modificación del contrato y una subida de los precios.

De forma inmediata desde el Ayuntamiento de Altea se levantó acta del incumplimiento unilateral del contrato por parte de la empresa constructora y por Junta de Gobierno Local se aprobó una orden de reinicio inmediato de las obras a la empresa Urbamed SL. Además, y para minimizar los efectos del paro de las obras, desde la concejalía de Infraestructuras se encomendó realizar las acciones oportunas, de seguridad y limpieza, para que las calles fueran transitables y no supusieran ningún perjuicio para el normal funcionamiento de los peatones y el tráfico, mientras durara este conflicto administrativo.

Una vez retomadas las obras, tanto el alcalde como el concejal han informado públicamente de nuevo sobre el estado de las mismas. Como ha explicado el concejal de Infraestructuras, »se han reanudado las obras y la previsión es que finalicen a lo largo de este mes de junio, antes de comenzar la temporada alta de verano». Roque Ferrer afirmaba que »la responsabilidad de la empresa es terminar las obras en las condiciones que marca el contrato firmado y en ese sentido defenderemos los intereses del municipio».

Asimismo, Jaume Llinares y Roque Ferrer lamentaban los inconvenientes que esta paralización ha causado a la ciudadanía. »Hemos sufrido una situación forzada por la propia empresa para querer obtener un mayor rendimiento de las obras, motivada por la adjudicación a la baja de los contratos». Por ello, desde el Ayuntamiento de Altea ya están tomándose medidas para corregir y modificar la ley de contratos y evitar así los perjuicios que causan las licitaciones a la baja.

 

Actuaciones que modernizarán las calles del casco urbano

Mediante estas obras, que han sido subvencionadas parcialmente por la Diputación provincial, según informa el concejal de Ciclo Hídrico e Infraestructuras, se llevarán a cabo una serie de actuaciones que modernizarán y mejorarán el estado de estas calles y callejones del casco urbano sobre los que no se había actuado en muchos años. Así, ha detallado el concejal, se ampliarán las aceras con la medida mínima que establece la Ley, lo que mejorará la movilidad de los peatones; se repavimentaran las calles en mal estado utilizando el mismo modelo que el utilizado en la calle Compte de Altea »para darle homogeneidad a la vía pública, pero con un acabado rugoso para evitar resbalones»; se dejará preparada una canalización enterrada para eliminar el cableado de las fachadas y los vuelos de cables; se instalará alumbrado en las callejuelas que eran deficientes en ese sentido; se plantará arbolado en la calle Adolfo Quiles para ampliar las zonas verdes dentro del casco urbano. Por su parte, el Ayuntamiento ha financiado el cambio de las tuberías que contaban con materiales prohibidos y el desdoblamiento de la red de saneamiento y pluviales, lo que supondrá un ahorro energético y ayudará a reducir el colapso de la depuradora en épocas de lluvia.

Finalmente, ha añadido el concejal, »las actuaciones también tienen previsto eliminar el giro a la izquierda en la calle Doctor Adolfo Quiles, y ese semáforo está previsto situarlo en el cruce de la calle La Tella con la CN-332 en cuanto se obtenga la autorización del Ministerio de Fomento, trasladando así al límite externo del núcleo urbano donde hace falta un paso para peatones que cruce la mencionada carretera estatal». Además, los pasos de cebra sin semáforo de la N-332 se señalizarán con paneles verticales luminosos para aumentar la seguridad de los peatones.

 

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