Este molusco bivalvo es una especie protegida que está desapareciendo del entorno marino del Mediterráneo
La nacra (Pinna nobilis), un molusco bivalvo gigante y que es una especie protegida que habita las praderas de posidonia como las de nuestra bahía, alrededor de la isleta de la Olla, y a lo largo de todo el Mediterráneo, está muriendo a causa de un patógeno. Ante esta situación desde la Concejalía de Medio Ambiente y con la colaboración de la bióloga marina, Rebeca Velasco, de la Asociación Poseidón (Conservación del Medio Marino), se está haciendo un seguimiento de esta especie desde mediados de septiembre del pasado 2016.
»El motivo de realizar este estudio para la recuperación y mejora del entorno marino de la isla de la Olla, es hacer un seguimiento para conocer qué ha ocurrido con esta especie y la capacidad de regeneración de nuestro ecosistema» , informaba Beatriz Nomdedeu, concejala de Medio Ambiente.
Las nacras han desaparecido de todo de todo el litoral mediterráneo, desde las costas de Murcia, pasando por las de la Comunidad Valenciana, excepto Castellón, donde parece que hay nacras vivas, hasta las bahías de las Islas Baleares. Rebeca Velasco explicó que tienen expectativas de repoblar la pradera de posidonia de nuestra bahía, de cara al verano, ya que es la época de reproducción de esta especie. También, agregó, que se reproducen por medio de larvas que van nadando por el mar hasta encontrar algún lugar fijo donde establecerse. Por eso tienen expectativas de poder repoblar la pradera de la isla de la Olla y continuarán haciendo este seguimiento para ver la evolución de esta especie protegida.
»Desde la Concejalía de Medio Ambiente estamos preocupados por la evolución de nuestro entorno marino y por la evolución de la nacrea que es un indicador de la salud ambiental que podemos tener en la bahía de Altea», señalaba Beatriz Nomdedeu , concejala de Medio Ambiente.
La propia concejala ha hecho un llamamiento de respeto al entorno marino de nuestra bahía, y ha recordado que a la hora de fondear se busquen claros de arena y que se no fondee ante la posidonia. »Además, la fauna y la flora, como las nacras, las estrellas de mar o la pradera de posidonia, no son juguetes y hay que tener mucho cuidado de ellos. Y más ahora, en la época del año que más disfrutamos de este entorno, ya sea nadando, buceando o con embarcación. Más que nunca debemos cuidar de nuestro ecosistema, el bienestar de este espacio garantizará el futuro bienestar nuestro. Por ello hacemos un llamamiento de respeto a nuestro entorno», concluía Nomdedeu.
