El pasado 24 de noviembre el Ministerio de Fomento
procedió a realizar unas obras de mejora en la Nacional 332 a su paso por
Altea, concretamente en el tramo que comprendía el Cuartel de la Guardia Civil
de la localidad y el enlace con la autopista. Dichas obras que iban a tener una
duración de una semana, consistían en el microfresado del asfalto para dotarlo
de mayor rugosidad ante la llegada de las lluvias, y de esta forma, permitir un
mayor agarre de los neumáticos.
Pero el resultado de la mejora no ha sido el
esperado, y numerosos vecinos y comerciantes de Altea se han dirigido al
Ayuntamiento para presentar sus quejas. De hecho en algunas zonas el asfalto se
ha levantado dejando bastantes desperfectos. Según la edil de Actuaciones
estratégicas, Yolanda Gallardo, “tras la actuación realizada por los operarios
del misterio han quedado muchas calvas en el asfalto, y se ha dejado resto de
piedras en todos los arcenes, bordillos y aceras”, destacaba Gallardo, que
señalaba que las quejas por parte de los vecinos son lógicas.
Para el consistorio alteano, las obras han sido mal
planteadas. Según Jaime Sellés, Concejal de Escena Urbana, “el resultado ha
sido un autentico desastre que esta perjudicando a vecinos, comerciantes y
viandantes. Ahora mismo perjudica la imagen de Altea y no cabe otra medida que
hacer la reclamación pertinente al
ministerio para que de una respuesta”, subrayó Sellés, que avanzó que la
solución podría estar en la restitución del firme con una capa de asfalto,
aunque deberán de ser los técnicos del Ministerio de Fomento los que den la
solución definitiva.
