El pasado sábado 29 de noviembre la erosión provocada por el
fuerte oleaje y por el temporal de mar, provocó serios desperfectos en el vial
de acceso al Puerto Deportivo de Campomanes “Marina Greenwich”. Parte de la calzada
se vino abajo y con ella las conducciones de agua potable y alcantarillado que
llegan al puerto deportivo y a los vecinos de esta parte de Altea.
Las obras son competencia de la Dirección General de Costas,
pero el Alcalde de Altea Miguel Ortiz se comprometió a que el propio consistorio
las ejecutaría por vía de urgencia, si no se acometían con celeridad. De esta
forma y con el beneplácito de Costas en el proyecto propuesto por los técnicos
municipales, ayer quedaron finiquitadas las obras de reparación de los
desperfectos, a falta de la finalización del muro de contención de piedras del
vial. Unas obras que han tenido un coste de 22.800 euros y han sido realizadas
por la empresa Bolo y Baldomero.
Para el Gerente de la empresa Bolo y Baldomero, Quico Bolo,
las obras han consistido en el rellenado del hueco que se llevó el mar con
piedra, “además se ha repuesto las tuberías rotas y con un acabado de losa de
hormigón se va a terminar asfaltando la parte de arriba. Para acabar
recubriremos el muro de mampostería con una protección de piedra de escollera,
similar al ya existente”, recalcó Bolo que indicó que se repondrá también la
acera que había antes del hundimiento del vial.
Según Jaime Sellés, Concejal de Escena Urbana e
Infraestructuras, se trataba de una obra de emergencia que se tenía que
ejecutar con la mayor celeridad, “hay que valorar la rapidez de los
técnicos municipales, los técnicos del departamento provincial de Costas y la
empresa Bolo y Baldomero, por la ejecución de las obras. Se trata de un vial de
acceso muy importante para esta zona de Altea, por eso hemos de felicitarnos de
la efectividad de los servicios municipales y el trabajo realizado por la
empresa”, destacó Jaime Sellés, sobre unas obras que ayer quedaron
prácticamente finalizadas a falta del muro de mampostería.
