El concejal de Infraestructuras, Jaime
Sellés, ha asegurado que “la concesión de la licencia es un acto reglado,
por lo que la única forma de evitar otorgarla sería con un informe en contra
del Departamento de Urbanismo y Actividades, que no existe”. Sellés también
ha recordado que el Síndic de Greuges, José Cholbi, ya se dirigió al
Ayuntamiento el pasado mes de agosto con un informe en el que exigía que, en un plazo
máximo de un mes, el Ayuntamiento desbloqueara esta residencia.
En dicho
escrito, la Sindicatura de Greuges manifestaba que el Ayuntamiento de Altea “debe
adoptar las medidas oportunas para que se dicte resolución expresa a los
recursos formulados por los interesados (Ayuntamiento de Oslo)” y exigía
que se le conceda la licencia, una vez que la Generalitat Valenciana
concediera el interés comunitario necesario para este tipo de licencias, y de
que el Departamento de Urbanismo haya emitido todos los informes preceptivos
favorables.
El pasado mes de septiembre el Ayuntamiento de Altea
autorizó al Ayuntamiento de Oslo la construcción de este centro asistencial en
Montemolar. El proyecto recibió la Declaración de Interés Comunitario en
noviembre de 2007, en la pasada legislatura, sin que el anterior equipo de
gobierno mostrase su disconformidad a dicha resolución, ni interpuso recurso
vía administrativa o judicial.
