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 Este protocolo, fruto del trabajo conjunto entre la
Concejalía de Servicios Sociales de Altea y del Departamento de Salud 16 de la
Agencia Valenciana de Salud, se convierte en pionero en nuestra provincia,
planteando una intervención domiciliaria novedosa y que va a repercutir muy
positivamente en la calidad de vida y bienestar social tanto del paciente como
de los familiares.

  El presente protocolo
pretende coordinar dos servicios públicos: uno de carácter social prestado por
el Ayuntamiento de Altea, el denominado Servicio de Ayuda a Domicilio y cuyo
objetivo principal es prestar cuidados personales, como ayuda a la higiene
personal, cambios posturales, toma de medicación, compañía, supervisión, etc
principalmente dirigido a personas mayores y personas con discapacidad; y el
otro, de carácter sanitario, prestado por la Agencia Valenciana de Salud, la
denominada Unidad de Hospitalización a Domicilio que principalmente se encarga
de los cuidados sanitarios a nivel paliativo, es decir, personas con una
esperanza de vida, generalmente, no superior a seis meses, tanto oncológicos
como pluripatológicos.

  Si bien, tanto el SAD y como la UHD, tienen en un
principio finalidades diferentes, existen claras conexiones, como es el ámbito
donde son prestados: el domicilio,
por lo que una  prestación conjunta y
coordinada va a beneficiar notablemente en la mejora de la calidad de vida del
paciente paliativo y especialmente de los familiares más cercanos encargados de
sus cuidados más básicos e inmediatos.

  La finalidad se centra básicamente en detectar en los
pacientes atendidos por la UHD aquellos casos concretos, que por diferentes
circunstancias, puedan precisar además de unos cuidados a nivel social,
entendidos un sentido amplio, ya que irían desde mantener una higiene personal
idónea hasta a ofrecer al familiar orientaciones de cuidados básicos, un apoyo
psicosocial y un acompañamiento en el proceso de duelo, ya que una peculiaridad
y lo que le diferencia del servicio de ayuda a domicilio ordinario es que el
perceptor del servicio también va a ser el cuidador-familiar en la última etapa
de vida del familiar enfermo.

  También con este protocolo se aminoran los trámites
de  solicitud del servicio domiciliario,
se agiliza su puesta en marcha y especialmente se amplía un valioso canal de
comunicación y coordinación entre el ámbito social y el ámbito sanitario. Así,
a modo de ejemplo, y gracias a este protocolo, una persona que desde el
Hospital se le dé el alta en la Unidad de Hospitalización a domicilio, siendo
trasladado a su domicilio, podrá disponer al mismo tiempo y desde el primer día
del servicio de ayuda a domicilio de Altea.

  Además hay que destacar el carácter multidisciplinar
de este protocolo, donde van a participar diferentes profesionales: médicos,
enfermeros, trabajadores sociales y auxiliares de ayuda a domicilio.

  Tal y como ha asegurado el concejal de Sanidad y
Servicios Sociales, Gregorio Alvado, “nuestro
propósito ha sido pensar en aquellas personas enfermas en su última etapa de la
vida y muy en especial en los familiares, para realizar un acompañamiento y un
apoyo social, sanitario, psicológico y emocional, todo ello para que tanto
desde el Ayuntamiento de Altea como desde la Agencia Valenciana de Salud
pongamos a disposición de los ciudadanos todos los recursos existentes para
mantener, restablecer e incrementar el nivel de bienestar físico y psicosocial
de la persona enferma y el de su núcleo de convivencia”.

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