La pirotecnia Caballer sorprendió a los más de 50.000 visitantes que se encontraban a lo largo de toda la costa de Altea y alrededores con un espectáculo vistoso, con mucha luz y variedad de colores. Al iniciarse, un juego de fuegos artificiales mostraba a todo el mundo que este año se celebra el 25 aniversario del Castell de l’Olla, no faltaron los tradicionales pavos reales y el ritmo intenso de los fuegos sobre el mar. La playa de la Olla se encontraban repleta de público así como todos los alrededores de Villa Gadea, Campomanes, y en definitiva, toda la costa norte del municipio.
El alcalde de Altea, Miguel Ortiz, se mostraba orgulloso de poder organizar “y ser anfitriones de un evento que convoca a más de 50.000 personas en una noche que año tras año es capaz de seguir sorprendiendo y más en estas bodas de plata con las novedades y la creatividad de los pirotecnia Caballer, una de las mejores de la Comunidad Valenciana y del mundo”. Ortiz habló de “superar el récord de las 50.000 personas ante la afluencia de turistas que nos permite este puente de vacaciones del 15 de agosto”.
El Castell de l’Olla atrae todos los años a multitud de personalidades del mundo de la política, las artes y la cultura. Invitados por el Ayuntamiento, asistió el director general de Infraestructuras, José Vicente Dómine; la directora general de Patrimonio y Cultura, Marta Alonso; el director de Canal 9, Luis Redondo; diputados provinciales como Juan Bautista Roselló, Enrique Ponsoda, Mónica Lorente, autonómicos como Enric Morera y nacionales como Miguel Peralta y Macarena Montesinos; alcaldes de Finestrat, La Nucía, Benifato, Callosa d’En Sarriá y El Campello y los representantes de la Cofradía Castell de l’Olla.
El dispositivo de Seguridad y Tráfico movilizó a un número importante de efectivos de la Guardia Civil, Policía Local, Bomberos, Protección Civil, Servicios Sanitarios y se establecieron desde FGV un aumento de itinerarios de los trenes para atender los desplazamientos. Desde la Policía Local de Altea se ha detectado un menor uso de vehículos en esta edición que ha permitido que ya a las tres de la madrugada la nacional 332 estuviese despejada y que no se produjese ningún incidente.
El Castell de l’Olla supera la visita de 50.000 personas en la costa alteana
