La concejala de Tráfico y Seguridad Ciudadana, Patricia Mora, acompañada por el Alcalde y el edil de Infraestructuras, ha presentado el inicio del proyecto de Infraestructura Inalámbrica de Seguridad Vial. Mora ha explicado que se trata de “un proyecto integrado de telecomunicaciones y video-vigilancia que va a permitir incrementar la eficacia de la policía local, aumentando así la seguridad de todos los ciudadanos”.
Mora ha señalado que la instalación de estas cámaras se llevará a cabo tanto en el Casco Urbano de Altea como en las urbanizaciones. “Se instalarán 19 cámaras de control del tráfico y seguridad, junto con lectores de matrícula, que van a estar estratégicamente situadas en rotondas, cruces, accesos al término municipal y urbanizaciones. Estas cámaras serán gestionadas desde el retén de la Policía Local”, ha matizado la responsable municipal de área. En cuanto a la instalación de cámaras en las urbanizaciones, Patricia Mora ha especificado contarán con una de ellas el acceso a la Galera de las Palmeras, acceso a Sierra de Altea, Font del Garroferet, Puente de Altea Hills, entre otros, “por lo que Altea va a estar controlada por todos sus accesos”.
“El coste de la actuación asciende a más de 300.000€, que junto a la instalación de cámaras en la zona de Cap Blanch que tenía un coste de 70.000€, va a suponer la mayor inversión en cuestiones de tecnología y de seguridad que ha tenido este municipio”, ha indicado Mora.
La actuación, financiada por el Plan PIP de la Generalitat, ha sido desarrollado por la empresa Consultoría Técnica Avanzada y en su nombre, el gerente, José Ángel Sánchez, ha añadido que “el sistema se basa en una red en sistema pre-wimax que se instala muy rápidamente, no tiene consecuencias para los ciudadanos porque no hay obra civil y sobre todo es una instalación muy limpia”.
Por su parte, el Alcalde ha recordado que “este es un proyecto más de todos los que se están llevando a cabo en Altea y todo el mundo conoce la eficacia que ha tenido la colocación de cámaras en el Planet”. Además, Andrés Ripoll ha indicado que “se pretende que desde el retén de policía se pueda controlar toda la circulación en los puntos clave en los que se van a instalar las cámaras”.
Durante la visita a la rotonda de la calle Garganes, lugar en el que se ha instalado una de las cámaras referidas, el primer edil alteano ha declarado que “la mejora del tráfico y de la seguridad era una demanda de la ciudadanía y con la instalación de estas cámaras, estos servicios mejorarán, ya que las cámaras tendrán su correspondiente pantalla en el retén de la policía, donde se podrá controlar todos estos accesos, cruces y entradas a las urbanizaciones”.
Finalmente, el alcalde ha agradecido al Grupo Seidor, concesionario de la contrata, el trabajo que está realizado y ha manifestado satisfacción por la puesta en marcha de este proyecto gestionado por el Consistorio.
