Recibió la Mención de Honor, el Trofeo de la Socieda Filarmónica y el Premio Villa de Altea
La Unión Musical Santa Cecilia de Villar del Arzobispo (Valencia), bajo la dirección de Enrique Artiga, se impuso el sábado en la Sección Primera del 37º Certamen Internacional de Bandas de Música Villa de Altea, con una puntuación de 544,70 puntos (sobre un máximo de 600), que le valieron la Mención de Honor del Certamen, además del Trofeo Sociedad Filarmónica Alteanense (organizadora del evento), y el premio ‘Villa de Altea, dotado con 8.000 euros.
El jurado internacional presidido por el belga Bert Appermont y con Mercedes Padilla y Enrique Sanz Burguete como vocales, otorgó también el primer premio, con 501 puntos, a la banda venida de Japón Kanagawa university Symphonic Band. Por último compartieron el segundo premio la Banda Artística de Merza (Pontevedra) con 479,50 puntos y la Banda Asociación Recreativa y Musical de Vilela (Portugal) con 403,50 puntos.
La banda ganadora interpretó magistralmente la pieza obligatoria, ‘Poema Polar’, compuesta expresamente para este certamen por Joan Enric Canet i Todolí. Además, abrió su participación en el concurso con el pasodoble “Lagartijilla” de Martín Domingo, y eligió como obra libre la composición de Ferrer Ferran “Concert per a Orquestra de Vents i Percussió”.
El presidente de la Sociedad Filarmónica Alteniense, Manuel Bonastre, resaltó la calidad de todos los participantes y destacó la presencia de la banda nipona “porque abre nuestro certamen a otros continentes”. Según Bonastre, esta edición ha contado un elevado nivel interpretativo por parte de todos las bandas invitadas, “que en definitiva es lo que marca el prestigio de nuestro encuentro, cada edición consolidándose como referencia en España y en gran parte del mundo”.
Bonastre señaló que la presencia de la banda procedente de Japón no es el único elemento que hace de la 37ª edición del Certamen uno de los más internacionales de su historia, sino también la presencia en estos días de 13 profesores de música procedentes de Marruecos y una delegación de Colombia.
El presidente de la Filarmónica señaló que el convenio de colaboración, establecido gracias al Ministerio de Asuntos Exteriores español, con colegas marroquíes permite exportar “nuestro modelo de gestión de bandas, nuestro sistema de enseñanza y administrativo, al mismo tiempo que nos ofrece la oportunidad de conocer a otros músicos. Es una cooperación mutua e interesante para todos en un proyecto a tres años vista”.
En este sentido se manifestó Wilder de Jesús Román, director de banda procedente de Colombia e invitado como observador al certamen, alabó la organización donde “hay un especial cuidado a la música y a los músicos, un lugar para cada uno y uno en cada lugar”. Según Román, “me ha sorprendido las piezas musicales, en especial la obligatoria, que es interpretada ante el compositor, circunstancia que debe imponer mucho”.
