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Tras la sesión plenaria celebrada en el día de ayer, el Grupo Municipal Popular ha emitido una nota de prensa en la que acusa al Equipo de Gobierno de aumentar la presión fiscal sobre los ciudadanos con la revisión de las autoliquidaciones del ICIO. Una medida que quedaba aprobada con los votos a favor de PSOE, CIPAL y BLOC y en contra del PP.


Comunicado emitido por el Grupo Municipal Popular


El PSOE de Altea, ha aprobado hoy en el Pleno de la Corporación un convenio con Suma, para recaudar un millón de euros más de los ciudadanos, vía inspección tributaria.


Siete meses ha tardado el Partido Socialista en el gobierno de Altea,  en encontrar una fórmula para sangrar a los ciudadanos de Altea con un millón de euros más, después que el pasado mes de Noviembre el Partido Popular y el Bloc, paralizaran la subida generalizada de impuestos.


El millón de euros que el Partido Socialista tenía pensado recaudar, elevando el ICIO al máximo permitido legalmente, y que rechazó el Pleno en Noviembre, será ahora recaudado, inspeccionando las autoliquidaciones, que por dicho impuesto tienen que presentar los ciudadanos.


Es curioso que el Partido Socialista, haya tardado tanto en aplicar esta vieja formula socialista para engañar a los ciudadanos. Se empieza por convertir a cualquier ciudadano que solicita una licencia de obra o de reforma, en sospechoso de fraude, corregir al alza los valores, que declaran los ciudadanos, de manera que se recaude un millón de euros más.
“Si no me habéis permitido, subir el tipo impositivo, ahora subo la valoración, y arbitrariamente el valor de la obra y recaudo lo que tenia pensado sacar de los bolsillos de los alteanos.”


En inconcebible, que en plena crisis de la economía y especialmente del sector inmobiliario, el Partido Socialista de Altea, siga alejado de los ciudadanos, y solo piense en hacer “caja” a costa de estos, aumentando la presión fiscal sobre los mismos.


El Partido Socialista parece ignorar que de cada cinco licencia de obras, que se solicitan, cuatro se corresponden con solicitudes de obra menor, ciudadanos que han decidido reformar su casa, hacer un baño, o cambiar el suelo. Y de las obras mayores, la mayor parte son solicitudes de particulares para viviendas unifamiliares.


Por tanto, a la recaudación vía inspección, no es como se ha dicho, una medida que afecta solo a empresas constructoras que tampoco pasan por su mejor momento, sino a los ciudadanos de a pie a los que se les vuelve a sangrar.



 

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